Crédito: una breve, pero necesaria, introducción

Para construir un buen historial e incrementar tu score, primero es necesario entender qué es el crédito y cómo funciona y cuáles son los errores más frecuentes al utilizarlo, así que, ¡comencemos!

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¿Qué es el crédito? 

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El crédito es dinero que te presta una institución y que debes devolver en un plazo determinado, que puede ser de días, meses o años.

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Otro componente importante del crédito es que generalmente debes pagar una cantidad de intereses previamente pactada, a menos que se especifique que es un crédito sin intereses.

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En ese orden de ideas, un punto importante que debes considerar en torno al crédito es que, si no lo pagas en tiempo y forma, la principal consecuencia que tendrás que enfrentar será el cobro de intereses moratorios y de gastos por cobranza.

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Pero eso no es todo, pues cuando incumplas con tus pagos, tanto tu historial como tu score resultarán perjudicados, lo que a su vez podría limitar tu acceso al crédito o incluso que te lo nieguen por completo y de manera definitiva.

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¿Cómo funciona un crédito?

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Casi todos los créditos funcionan de la siguiente manera:

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1. Haces una solicitud de crédito en una institución financiera, puede ser un banco o una fintech, por ejemplo.

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2. La institución analiza tu perfil financiero y con base en sus criterios de selección aprueba o rechaza tu solicitud de crédito.

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3. Si es autorizada tu solicitud, la institución te presenta una propuesta de crédito donde se especifican la tasa, plazo y demás condiciones.

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4. Si aceptas la propuesta, el crédito se formaliza por medio de un contrato y tú realizas el pago conforme a las condiciones ahí establecidas.

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Tipos de crédito

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Existen al menos cuatro tipos de créditos: créditos al consumo, empresariales, hipotecarios y automotrices, a continuación te contamos las principales características de cada uno de ellos.

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Créditos al consumo 

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Son aquellos que se otorgan a una persona para que compre bienes o servicios, pagándolos en un plazo determinado y con una tasa de interés previamente pactados. 

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Los créditos al consumo más comunes y utilizados son:

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• Tarjetas de crédito. Es una línea de crédito que te otorga una entidad financiera para pagar productos y servicios. Básicamente te asignan una cantidad de dinero, conocida como línea de crédito, con la que puedes hacer compras. Sin embargo, debes liquidar esas compras cada mes para que no te cobren intereses. 

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• Créditos personales. Son los préstamos donde la entidad financiera pone a disposición del usuario una suma de dinero para que lo destine al objetivo que éste prefiera: comprar bienes de consumo, cubrir gastos personales, pagar deudas, etcétera.

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• Créditos de nómina. Son financiamientos cuyas mensualidades se descuentan directamente de la nómina o del salario de las personas que lo solicitan. Generalmente este tipo de créditos se les otorgan a trabajadores que reciben un salario fijo semanal, quincenal o mensual.

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Créditos empresariales

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Son aquellos que se otorgan a quienes desean iniciar o ampliar un negocio. Habitualmente son la alternativa que buscan las pequeñas y medianas empresas para conseguir capital de manera inmediata. Aunque no es regla, casi siempre es requisito ser o tener una empresa formal o ser una persona con actividad empresarial.

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Crédito hipotecario

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Son aquellos cuya finalidad es adquirir, construir o remodelar una propiedad o bien inmueble, ya sea una casa, local comercial o departamento. Para obtenerlo, debes depositar un enganche o aportar una pequeña parte del valor total de la vivienda, así como cubrir gastos notariales y administrativos.

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Crédito automotriz

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Es un financiamiento para comprar un auto nuevo o usado. También te piden un enganche, así como la contratación de un seguro. Al igual que los créditos hipotecarios, los créditos automotrices suelen ofrecer tasas más bajas que las de las tarjetas de crédito porque existe un bien que pueden quitarte en caso de que no pagues, en este caso, por ejemplo, el auto.

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10 errores frecuentes al usar los créditos

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Estos son los principales errores que cometen las personas al usar sus créditos:

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1. No pagar puntualmente, ya sea por olvido o falta de ingresos. Como ya lo mencionamos, no pagar en tiempo y forma tus créditos tiene consecuencias importantes.

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2. Gastar más del 30 por ciento del límite de crédito de tus tarjetas, ya que esto reduce tu capacidad de pago y puede afectar tu score. 

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3. Pedir varios préstamos en poco tiempo. Si lo haces, tendrás muchas consultas en tu reporte de buró, algo que también afecta tu calificación. 

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4. Tener un número inadecuado de créditos activos. Más adelante te contaremos cuál es el número de créditos activos que debes tener idealmente.

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5. No revisar ni comparar el Costo Anual Total (CAT) ni la tasa de interés. Si no comparas, es posible que termines aceptando una opción que no te convenía.

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6. Hacer el pago mínimo, porque además de generar costosos intereses, alarga el tiempo que necesitarás para liquidar el total del adeudo.

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7. No contemplar el pago de los créditos en el presupuesto quincenal o mensual. ¿Frecuentemente no tienes para pagar? Este podría ser el motivo.

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8. Pedir un préstamo por pedirlo, sin destinarlo a un objetivo claro y concreto. Asegúrate de solicitar y aceptar sólo aquel crédito que realmente necesites.

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9. No consultar tu score ni tu reporte de crédito periódicamente. Si no vigilas tu información crediticia, puedes llevarte desagradables sorpresas más adelante.

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10. Tomar la decisión de pedir un crédito sin antes analizarlo y decidirlo con la familia, especialmente con la pareja.

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Test

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Hagamos un breve test para evaluar qué tan bien o mal estás manejando tus créditos:

1. ¿Para qué sueles tramitar un crédito personal?

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a) Para comprar algo que necesito.

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b) Para pagar una emergencia.

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c) Ninguna de las anteriores.

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2. ¿Para qué utilizas mayormente tu tarjeta de crédito?

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a) Para llegar a fin de mes.

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b) Para adquirir algo que no puedo costear con mis ahorros o ingresos.

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c) Para aprovechar ofertas, puntos y recompensas.

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3. Antes de adquirir cualquier crédito, ¿comparas?

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a) No, tramito el primero que me aprueban.

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b) A veces.

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c) Sí, por lo menos, un par de opciones.

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4. ¿Sabes qué tasas de interés y comisiones te cobran los créditos que manejas?

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a) No, no creo que sea importante.

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b) Más o menos, nunca me fijo en esas cosas.

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c) Sí, fue en lo que me fijé antes de tramitarlos.

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5. ¿Sabes cuáles son las fechas de tus pagos?

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a) No.

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b) Más o menos.

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c) Sí.

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6. ¿Has pedido prestado a familiares y/o amigos para hacer tus pagos mensuales?

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a) Sí.

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b) A veces.

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c) Nunca.

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7. ¿Qué tan probable es que aceptes un crédito sólo porque te lo ofrecen?

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a) Muy probable.

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b) Poco probable.

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c) Nada probable.

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8. ¿Sientes que el dinero nunca te alcanza?

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a) Sí.

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b) A veces.

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c) No, soy muy organizado.

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9. Si ya no pudieras pagar tus deudas, ¿buscarías otro crédito para financiarte?

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a) Sí.

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b) Trato de que sea mi última opción.

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c) Sólo lo haría si ese crédito me ayuda a pagar las deudas que ya tengo.

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9. ¿Has pedido un crédito para pagarlo con otro?

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a) Sí, varias veces.

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b) Alguna vez, pero trato de que sea mi última opción.

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c) Sólo cuando me ayuda a pagar deudas a un menor costo.

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10. ¿Qué tan común es que dispongas de efectivo con tu tarjeta de crédito?

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a) Muy común, incluso he llegado a pagar créditos con ese dinero.

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b) Poco común, sólo en alguna emergencia.

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c) Nunca lo he hecho.

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Resultados: si la mayoría de tus respuestas fueron “a”, no haces un buen uso del crédito y te urge tomar medidas cuanto antes. Si la mayoría de tus respuestas son “b”, te defiendes, pero puedes y debes mejorar. Por último, si la mayoría de tus respuestas fueron “c”, felicidades, todo apunta a que sabes manejar adecuadamente el crédito. Sin embargo, no pierdas de vista que este es un test meramente informativo y que el diagnóstico sobre qué tan bien o mal manejas el crédito puede ser más complejo.